Niños de la calle en la España ACTUAL

 

Niños de la calle en el Madrid de la Guerra Civil ¿Estamos ante un regreso al pasado? (Imagen de archivo)

 En los últimos tres años no cesan de salir a la luz en mi país casos de absoluta delincuencia provocados por menores de 18 años. Casos como el ataque racista de tres menores en el metro de Madrid el año de la pandemia y la agresión a un joven autista en Barcelona así como las violaciones a jóvenes en Burjassot  y el asesinato de un turista mexicano en Carabanchel son ejemplos que hablan por sí solos. También el cine y el teatro cada vez más retratan en películas como La Inocencia o La Maternal y obras como Asesinato y adolescencia la evidente decadencia de la sociedad española, cuyos jóvenes se ven obligados a delinquir y hacer auténticas barbaridades ante la falta de horizontes que se les presenta. 

 Estas evidentes realidades que pueblan la España actual me hacen pensar en el Brasil de los años 90 tan retratado en películas como Ciudad de Dios y Pixote. Sin duda parece ser que los problemas que en la década de los 90 y antes golpeaban a las sociedades latinoamericanas se han trasladado a mi querida Europa. Y es que también Italia, y especialmente en la zona del Sur, ha caído en un proceso de brasilización también reflejado en el cine actual. 

  Sin embargo, me duele reconocer que sinceramente NO ES NECESARIO IR AL CINE para observar este fenómeno. Basta con salir a la calle por cualquier ciudad española y comprobar que efectivamente cada vez más criaturas ibéricas transitan sin padres, esnifando pegamento, llenando el espacio con sus continuos gritos de improperios más grandes que sus escuálidos cuerpecillos, y más estulticias propias de una chiquillería sin futuro, hijos de familias empobrecidas por las crisis que nos asolan en estos tiempos. 

   Cada vez se hace más evidente en este país la necesidad de una suerte de "Madre Teresa de Calcuta" venida del extranjero para paliar nuestros gravísimos problemas sociales. Verdaderamente no sé a qué esperan los ricachones colombianos y peruanos que compran las viviendas que los nativos no nos podemos permitir para convertirse en nuestros "salvadores" (Pero salvadores EN SERIO, y no simples influencers que cuelgan vídeos de mendigos madrileños en las redes sociales).